Paciente y Fisio: Punto de partida

De entradas anteriores han surgido debates muy interesantes, yo tiré la piedra (que hiciera una entrada para el blog) a nuestro compañero @Pablo__KO quien comentó en el blog sobre como intentar hacer que el paciente vea desde otra perspectiva el «tengo una hernia discal» por ejemplo. Sin más dilación, os dejo su entrada, que personalmente opino que es sencillamente genial.

« Entre lo que pienso, lo que quiero decir y lo que digo…se encuentra lo que quieres escuchar, lo que crees comprender y lo que comprendes : seis maneras de no entenderse »

comunicacion

Esta frase de Jodorowsky a mi juicio describe lo que en ocasiones no está exento de convertirse un proceso de comunicación en cualquier contexto. En el marco de la entrevista clínica, saber comunicar consiste – entre otras cosas – en crear un clima facilitador en el que todos nos podamos expresar y tener la habilidad para obtener la información ajustada de la realidad que experimenta el paciente. La comunicación es el de los aspectos más valorados en un profesional de la salud, a la vez que el mayor motivo de queja e insatisfacción. (1)

Pienso que el paciente que expresa el motivo de consulta a través de la etiqueta diagnóstica lo hace como una forma de explicación adquirida, y para ubicarnos : » tengo artrosis, tengo una hernia, protusión…una protuberancia en la columna ( escuchado literalmente ), tengo epicondilitis…». El cerebro etiqueta y estructura por economía cognitiva, si a eso le añadimos las creencias, recuerdos, experiencias o  información nocebo-iatrogénica :

« «me dijeron que con el tiempo perdería mucha movilidad en el cuello por mi artrosis», «me dijo que me quedaría cojo para el resto de mi vida», o…»es que estuve 2 semanas en cama cuando me dio aquella vez tan fuerte y no quiero que me vuelva a pasar«, «es que vi en internet que…y claro, me asusté» ».

; seguido de conductas de evitación, hipervigilancia, sobreprotección y kinesiofobia…teniendo en cuenta estos aspectos y otros que se me quedan en el tintero (posibles ganancias secundarias, por ejemplo), es entendible y creo que incluso hasta adaptativo que «tengo una hernia» sea una carta de presentación frecuente en el motivo de la consulta y que incluso redunden sobre ello. La etiqueta diagnóstica, por otro lado, aunque no paute la ‘dosis’ de fisioterapia, tiene un peso importante como diagnóstico biomédico que no podemos desdeñar, a mi juicio. Otra cosa es lo iatrogenénico de la explicación clínica, la ausencia de ella, o la información adquirida e interpretada por el paciente por cualquiera que sea la vía.

Para reconducir esta situación, un ejemplo escueto y sencillo, de muchos posibles :

« Como fisioterapeuta para mí es importante el diagnóstico médico, lo tengo muy presente en mi trabajo y nos ayuda que me lo traslades. Si bien en este momento, si te parece me gustaría centrarme en que intentásemos describir tu situación en la actualidad y ver de qué manera podemos trabajar. A día de hoy, ¿ qué es lo que sientes ? »

Es reubicar el punto de partida. No vamos a partir de tu hernia ( sé que está ahí ), vamos a hacerlo desde lo que sientes. Por un lado resaltamos la importancia del diagnóstico teniendo consideración con la información que nos expresa el paciente, pero a la vez entornamos esa puerta y le invitamos de forma colaboracional a que nos ponga al tanto de su situación en el presente y de esta forma obtener un contenido valioso para nosotros, estableciendo los mimbres de lo que pretendemos que sea nuestra relación con él / ella en el marco de la Alianza Terapéutica (2)  y en pro a los objetivos que nos marquemos.

Una forma de desaprender o quizá atenuar conductas es aprender otras nuevas. Nueva información (nueva forma de información creo que es más preciso), nuevo procesamiento, nueva cognición, nueva perspectiva, nueva actitud, nueva situación. Bajo mi perspectiva, en el primer encuentro no son necesarias profundas explicaciones paradigmáticas al paciente sobre la fisioterapia…ni posicionarnos en una actitud imperativa : «no pienses en tu dolor» , «sé optimista», «tienes que»…»debes de». Opino que con el paciente de actitud que percibamos más fija, lejos de usar este tipo de imperativos, todavía más tenemos que atemperar la comunicación. Con fijación no quiero referirme a una creencia negativa instalada, más bien quiero hacer alusión a la actitud que tiene expresando esa creencia maladaptativa. Es decir, 2 pacientes con 2 creencias maladaptativas ( la misma ) pueden expresarla de manera muy distinta.

En mi opinión, el estilo de comunicación asertivo ( ser asertivo no es ser dócil ) en el marco de la consulta de fisioterapia es el más adecuado, siempre. Y desde ahí podemos trabajar su adherencia. Si bien, el tiempo y el roce establecen otras rutas de acceso y estrategias comunicativo-persuasivas de nuestra parte hacia el paciente más directas y paralelas una vez éste confía en nuestra profesionalidad…porque no nos olvidemos que él también hace su particular historia sobre nosotros y nos evalúa. O evalúa lo que decimos, más exactamente.

En relación a esto, evalúa la comunicación con más criterio cuanto más conocimiento tenga sobre lo que le pasa. De hecho, según el modelo de elaboración de respuesta cognitiva de Cacciopo et col (3), el paciente compara lo que la fuente dice con sus conocimientos, sentimientos y actitudes previas respecto al tema en cuestión, generando de esta manera respuestas cognitivas que le llevaran a decidir posteriormente si acepta o no nuestro mensaje. Y en virtud de esto, a parte de nuestro lenguaje verbal, el lenguaje no verbal y paralenguaje ( tono, gestión de silencios, modulación e inflexiones de la voz ) también influirán en el proceso comunicativoenvuelto, por cierto, en la dosis de empatía necesaria sin caer en un exceso de ella.

Para terminar, decir que espero las críticas de buen grado y abierto a si se genera algo de corriente de opinión; el tema da para muchos enfoques y matices, opino. Estoy muy agradecido por este guante en forma de colaboración que amablemente me ha lanzado Samuel y he intentado recogerlo a través de esta entrada, retomando los comentarios iniciales que la han promovido,  decirle o no al paciente que «no debe pensar» en su alteración…y dejando un último apunte:

Intuyo que si os invito a leer atentamente las líneas que vienen en mayúsculas a continuación en las que digo que :

NO PENSÉIS EN UN ELEFANTE BLANCO

…es muy probable que muchos de vosotros sea precisamente lo que hayáis hecho, o lo haréis. 😛

pd: Jodorowsky no es de mis predilectos, si no lo decía explotaba.

Podéis seguir las actualizaciones del blog mediante la página de Facebook https://www.facebook.com/SoyPacienteDeSamu esperamos que os agrade y compartáis las entradas para una mayor difusión de la fisioterapia que sigue siendo una disciplina sanitaria no bien conocida en algunos países.

1. Comunicación Médico-Paciente / Mitos en el Acné / Begoña Aguirregabiria Rubio / Profesora de Psicología y Comunicación en la EUNCET – UPC

2. Nuevos abordajes del dolor en fisioterapia / rubentovar.fisioterapiasinred.com

3. Ruiz, J. (1998)  / Mensajes persuasivos, en MOYA, M. y cols. (eds.) / Prácticas de Psicología Social.

Foto del día 09-06-14 a la(s) 11.55 #5

Pablo Cao Abad, fisioterapeuta titulado en el año 2009 por la UAX y Técnico Superior de Laboratorio Clínico por la Cruz Roja. Editor del blog Fisioterapia en la Galaxia. Actualmente estoy colegiado en el colegio de Andalucía y ejerzo en Granada donde he abierto centro propio hace pocos meses.

Esta entrada fue publicada en Comunicación, Dolor. Guarda el enlace permanente.

2 respuestas a Paciente y Fisio: Punto de partida

  1. MiguelHD dijo:

    Genial la entrada, Pablo. Creo que tus reflexiones son de lo más acertado. Hay que tratar de cambiar esas ideas que trae el paciente, pero no imponiendo las nuestras, o diciéndole que todo lo que sabe está mal y tiene que partir de cero (al menos no decirlo de forma tan brusca). Escuchar, preguntar, informar, formar… Todo ello es una parte muy importante de nuestro trabajo. Es importante que lo sepamos nosotros, y también el paciente. Que aprenda a ir al fisio a que le reenfoque la forma de ver su dolencia. La parte física lógicamente es nuestra seña de identidad, es el alma de nuestra profesión: ejercicio, masaje, movilizaciones… Pero la educación al paciente es parte vital. Necesitamos también mucha formación en el tema, como dices, en cuanto a asertividad y manejo de la entrevista al paciente para sacarle todo el partido al tiempo de tratamiento.

    Muy buena colaboración que te has buscado, Samu. Me ha encantado 🙂

    Me gusta

  2. Gracias por tus palabras, Miguel.

    Si la comunicación como herramienta terapéutica es esencial, la parte física es eliminatoria, sin ella estamos más que limitados; en la formación, evolución y desarrollo de esa parcela está la gran motivación como profesional y la clave del éxito del tratamiento, a mi juicio. Me alegro que hayas tocado ese punto, era algo que conscientemente me había dejado en el tintero y deseaba que saliese para poder reforzarlo.

    Lo comunicativo va de la mano, como comentamos. Escuchar para comprender y no para responder, incluso escuchar para escuchar : en ocasiones el paciente ( el ser humano en general, pienso ) ni siquiera busca que se le entienda, busca simplemente que se le escuche.

    Seguro que formación en técnicas comunicativas es necesaria, empezando a estudiar a Maitland me doy cuenta del hincapié que hace en esta parcela y lo importante que se torna en el campo de aplicación. Aspectos como objetivos, locus de control interno, alianza terapéutica, comprensión del tratamiento, participación, aprendizaje, adherencia, automanejo, autoeficacia…opino que todos ellos van marcados con el sello de la comunicación y cómo sepamos trasladárselo ( a parte de su capacidad y voluntad de absorver ).

    Y sentido común. No sé si hay formaciones al respecto pero eso también es condición sine qua non. 😛

    Un saludo !

    Me gusta

Deja un comentario