Construir la realidad

En la ponencia de Eduardo Fondevila en el congreso de la SEFID de octubre del año pasado, nos habló de humanidad y de la importancia de la comunicación en la tarea global del fisioterapeuta. Aquel concepto que explicó, desde aquel día, no dejo de darle vueltas por la serie de problemas que me crea en mi actividad diaria, me gustaría compartirlo y leer vuestras opiniones.

Eduardo dejó bien claro que “el lenguaje verbal, es una manera de comunicar y construir la realidad que nos rodea”. Con lo que un lenguaje rico/variado en palabras, verbos, adjetivos donde describan tamaños, texturas, contornos, detalles, olores, densidades, etc. Todo aquello que nos sirva para poder describir situaciones, acciones, objetos, sentimientos, emociones. Van a llevarnos inequívocamente a poder construir de una manera más detallada, la realidad que percibimos y palpamos, a otra persona con la que desarrollamos una conversación.

Hace dos años y medio que emigré a Francia. Los inicios siempre son duros, para expresar cualquier cosa, por sencilla que sea, era un reto importante a nivel de construcción gramatical y pronunciación fonética. Ahora un tiempo después, ya me muevo con soltura en la lengua del amor (francés), sin embargo, a la hora de comunicar conceptos sobre dolor, lesiones, proceso de cicatrización y curación, emociones personales, construir metáforas, etc. Sigo notando que logro construir una realidad un tanto timorata a nivel de riqueza lingüista.

Voy a poneros un ejemplo gráfico para que podáis entenderlo rápidamente. La imagen natural sería una situación muy bien explicada con muchos detalles y el dibujo del niño sería una situación donde se necesita de riqueza lingüística.

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En ocasiones tengo un sentimiento de frustración, por no poder dar con el mensaje clave, para hacer reaccionar al paciente en ciertas ocasiones, uno se da cuenta por el lenguaje corporal y la reacción de la persona, cuando tocas la fibra, le haces entender algo que es importante en el camino de la mejoría en su reeducación/rehabilitación. Cierta sensación de escasez de este componente dentro de la profesión, como si un cirujano lo tuviera todo para operar menos el bisturí.

Creo que es obligado un entrenamiento diario, de lectura de literatura variada para adquirir diferentes palabras que pueden hacer cambiar un discurso, de seguir mejorando el mensaje, de darle cercanía a la persona, donde cada uno tiene más afinidad con una serie de palabras y situaciones sociales, en definitiva de explicar nuestra actuación terapéutica manual y no ser un mero magreador de cuerpos, además de tranquilizar y darle pautas a seguir. Es muy dura la inmersión lingüística, pero en mi opinión le doy la misma importancia que a la manualidad terapéutica, ya que una destreza debe completarse con la otra por igual.

Muchas gracias por leer esta reflexión de un profesional en el exilio, que necesita compartir esta experiencia.

Podéis seguir las actualizaciones del blog mediante la página de Facebook https://www.facebook.com/SoyPacienteDeSamu esperamos que os agrade y compartáis las entradas para una mayor difusión de la fisioterapia, que sigue siendo una disciplina sanitaria no bien conocida en algunos países.

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3 respuestas a Construir la realidad

  1. Carlos Villel Moreno dijo:

    Hola Samu, entiendo perfectamente lo que dices. Veo como les cambia la cara cuando sienten que no soy capaz de expresarles lo que pienso. Efectivamente tener bien desarrolladas las habilidades sociales y de comunicación ayuda mucho, pero creo que la seguridad con la que cuentes la historia y lo que te esfuerces en contarla también ayuda, independientemente de que escojas o no las mejores palabras. Cuando acabé la carrera tenía una cosa clara, si el paciente me ve seguro en mi exposición del problema me seguirá, ahora solo falta tener la seguridad de creer en lo que cuento. Animo y a seguir trabajando por conseguir esa riqueza lingüística.

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  2. Fisiostyle dijo:

    La comunicación es el conjunto de muchas cosas, ciertamente la seguridad, tu postura corporal, la cadencia de tus palabras y silencios, el tono de tu voz, etc. Van a hacer un mensaje mucho más seguro.
    Pero luego en castellano soy capaz de detallarte una situación de varias maneras, con diferentes adjetivos, sinónimos y antónimos para explicar una situación clínica, eso hace que pueda entenderme desde un albañil hasta un abogado. No es cosa de ser clasista por si alguien lo piensa, es cuestión que por diferencias sociales y laborales, estamos más acostumbrados a un tipo de lenguaje. No es mejor ni peor, simplemente es más fácil dar en el clavo a la hora de hacer tu discurso. A esto me refiero en la entrada.

    Gracias por comentar Carlos, un abrazo!

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  3. Hola Samu,
    La verdad es que devolverle la historia de su problema al paciente en un lenguaje que comprenda, una vez nos ha contado ella la suya se convierte en una tarea titánica cuándo no lo haces en tu idioma. Empatizo bastante contigo ya que trabajé en un hospital en el extranjero y viví situaciones parecidas. Había veces que me cogía un cabreo monumental porque me decía a mí mismo «…joder, si esto mismo lo contaba yo en español en dos frases…». Además, algunos pacientes habían superado ya los 70 años y eran emigrantes italianos o griegos que habían viajado a Australia y que nunca aprendieron el idioma Inglés. Normalmente venían acompañados por alguno de sus hijos, por lo que había ratos en los que la comunicación fisioterapeuta-hijo de paciente-paciente y vuelta de nuevo al emisor era una verbena. Y cuando ellos no venían, pues con el italiano básico y a latinazos.
    De todas formas no hace falta irse a trabajar al extranjero para vivir esa experiencia, cada vez trato a más extranjeros en Madrid y las situaciones son similares.
    No desesperes y un truco: a veces NOI y Bodyinmind tienen traducidos algunos de sus recursos a otros idiomas. O los vídeos de understanding pain y similares los puedes encontraren francés y subtitulados.
    http://www.bodyinmind.org/?s=french

    Y si no, puedes ser un pionero… y lanzarte a ello. Yo llevaba «chuletas» al hospital con algunas frases clave y ejemplos. Me salvaron de varios apuros y no me da ninguna vergüenza reconocerlo. Al final acabas aprendiéndolas.
    Muy buena la analogía de la foto y el dibujo!
    Un saludo,
    Pablo

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